01 marzo 2007

brigada de homicidios de concepción

[Concepción] Hoy cumple 36 años de existencia. Los crímenes que marcaron a la Brigada de Homicidios. Los 16 oficiales que integran esta unidad de la policía civil han debido enfrentar difíciles puzzles investigativos.
Elenita Yáñez Roa, Jenny Torres, Paola González y Daisy Caamaño Maldonado son algunos de los nombres ligados íntimamente a la Brigada de Homicidios (BH) de la Policía de Investigaciones de Concepción. Y es que ellos marcaron la pauta de trabajo para esta unidad que hoy está cumpliendo 36 años de existencia. Por ello, Crónica trató de reconstruir los casos policiales más emblemáticos que ha tenido nuestra zona en la voz de dos oficiales de la BH.

Pequeña Inocente
El primero de ellos es una de las historias más impactantes que ha estremecido a nuestra región. Elenita Yánez tenía cinco años cuando fue violada y asesinada por Juan Zenón Soto Campos, el 8 de junio de 1996. El sujeto era amigo del abuelo de la pequeña, a quien visitaba en su domicilio del cerro La Pólvora, en Concepción.
En unas de esas oportunidades el tipo tomó a la menor y se la llevó a su casa, en Talcahuano. Ahí se iniciaron las horas de angustia para la familia. Primero acudieron a Carabineros, luego a la Policía de Investigaciones. Rápidamente los detectives identificaron el prontuario de Soto y se dieron cuenta que estaban frente a un peligroso violador, por lo que no tardaron en ingresar a su vivienda. Sin embargo, se toparon con el peor de los escenarios: el cuerpo de Elenita sin vida.
Pero luego de un arduo trabajo que se extendió cerca de una semana, la BH de Concepción en conjunto a detectives de Temuco, lograron dar con el paradero del asesino, quien se había escondido en Carahue, Novena Región.

Impacto Público
Según recordó el subcomisario José Luis Gallegos, "tras su detención los vecinos y familiares quisieron linchar a Soto Campos y tanto fue el impacto público que tuvo este caso que se logró constituir una agrupación de víctimas de atentados sexuales", dijo.

Huella Plantar Lo Delató
Otro caso significativo para la Brigada de Homicidios es el de la estudiante de derecho Jenny Torres Lorca, quien fue asesinada el 23 de abril de 2002. Ese día la joven regresó a su casa luego de su trabajo y al igual que Elenita Yánez, fue violada y asesinada.
El hecho alertó al personal de la policía civil, quienes utilizaron todos los medios técnicos y profesionales para buscar rastros. Los detectives de la BH y peritos del Laboratorio de Criminalística (Lacrim) recopilaron evidencias, entre ellas, las huellas plantares o de calzado del homicida, que finalmente fueron pistas claves en su detención.
"El autor nos manifestó que veía muchas películas policiales. A raíz de eso, tuvo mucho cuidado de no dejar huellas e incluso, le tiró detergente a todo el cuerpo, especialmente en los genitales de la víctima para tratar de ocultar toda evidencia", relató Gallegos. Sin embargo, no reparó en que sus pasos le impedirían protagonizar el crimen perfecto.

Tomé Impactado por Homicidios
Para el subcomisario de la BH, José Carmona, los crímenes de Paola González, Eduardo Parra y Daisy Caamaño, ocurridos en Tomé entre los meses de marzo y junio de 2004, "marcaron un hito en la Brigada y la gratificación que tenemos es que esos tres homicidios fueron resueltos satisfactoriamente. Ya tenemos a dos de los tres detenidos condenados y ahora estamos esperando el juicio del homicida de Daisy Caamaño". Y es que según indicó, la última tasa de efectividad en cuanto a la resolución de homicidios es de un 99 por ciento en nuestra zona. "El secreto de la Brigada de Homicidios para lograr el éxito es el trabajo en equipo. Aquí cada uno destaca sus mejores virtudes, ya sea en los sitios del suceso, empadronamiento, trabajo de cadáver o interrogar a los sospechosos", concluyó.
[Helia Avendaño R.]
[1 de marzo de 2007]

crónica]

2 comentarios:

KAREN dijo...

HOLA QUE TAL SOY KAREN Y ME GUSTARIA ALGUN DIA PERTENECER A UNA ORGANIZACION HAC, TENGO 15 AÑOS Y SOY DE COLOMBIA, Y ME INTERESA SABER MAS DE USTEDES... GRACIA... HASTA LUEGO

Felipe dijo...

Recuerdo bien ese caso mi papá Ricardo Luengo fue quien encontro el cuerpo de Elenita junto con su colega Pablo Cabezas, recuerdo la historia triste e impactante que me conto él al momento de encontrar a la pequeña y ademas la tristeza que el provoco el agradecimiento de los familiares por no haber podido hacer mas por ellos y sin embargo ellos se notaban tremendamente agradecidos, es de espera que la policia siga la misma senda que han tenido hasta ahora, un saludo a los policias y carabineros que aun cuidan nuestros días.