31 mayo 2007

5 años por matar a su primo

[Los Ángeles] Sentencia fue leída ayer. Campesino que asesinó a primo pasará 5 años en la cárcel. Sujeto está en prisión preventiva desde el año pasado, por lo que al castigo a cumplir se le restará el tiempo que ya ha estado privado de libertad.
A cinco años y un día de reclusión fue condenado Luis Alejandro Sáez Vargas, de 31 años, luego que ayer fuera leída la sentencia a cumplir tras el juicio que se le realizó la semana pasada en el Tribunal Oral de Los Ángeles. El individuo había sido declarado culpable por el homicidio de su primo, cometido el año 13 de julio de 2006, tras golpearlo con un palo en la cabeza.
En el texto redactado por el magistrado Carlos de Borguie y comunicado por Christian Osses se confirmó además la resolución dada a conocer durante la audiencia del viernes anterior, que descartó los cargos por lesiones graves y menos graves que también le eran imputados a este sujeto en la acusación abierta en su contra por el Ministerio Público, representado en este caso por el fiscal Álvaro Serrano.
Lo anterior, según se explicitó en el documento, al no ser probada fehacientemente la responsabilidad de este hombre en esos hechos, que denunciaron su tío y otro primo, padre y hermano de la víctima fatal, respectivamente.
Así, el hecho por el cual fue condenado finalmente este campesino ocurrió en un sector rural distante a unos 40 kilómetros de Laja, en medio de una discusión cuyo origen no está del todo claro, pero en la que participaron por lo menos cinco personas, todas ellas con algún lazo de parentesco y todos, salvo el fallecido, bajo los efectos del alcohol.
De un momento a otro, el homicida habría recogido un madero de casi dos metros de longitud, dejándolo caer dos veces, con extremada fuerza sobre el cráneo de su primo, identificado como José Javier Vargas Morales, de 34 años. El primero de los golpes fue suficiente para provocar la muerte del individuo, que dejó en este mundo a su esposa y tres hijos, de 16, 12 y 10 años de edad.

Denuncian Amenazas
A la salida de la audiencia, la madre del condenado sufrió un desmayo que motivó la llegada de una ambulancia del SAMU hasta este lugar. Algo, que bajo el parecer de la progenitora, María Teresa Morales Sáez, y una hermana del hombre muerto, sólo fue "para aparentar".
Ambas mujeres aseguraron haber sido objeto de constantes amenazas, tanto de los parientes directos del agresor, como del propio homicida, quienes les habrían manifestado que se cobrarán revancha por haber metido a Luis Sáez en la cárcel.
Triste epílogo para una historia que hasta antes del conflicto que significó tan drástico final, se había caracterizado por una relación cercana entre estos parientes.
"Siempre nos preguntaremos qué sucedió ese día, ellos eran amigos, salían juntos", reflexionó finalmente esta mujer, que no puede resignarse a que su hijo menor jamás volverá.
[31 de mayo de 2007]
la tribuna]

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