10 octubre 2007

condenado por violación de su hija

[Los Ángeles] Condenan a conductor de bus por violación de pequeña hija. El próximo sábado, a las 13 horas, será dada a conocer la pena a cumplir por Eduardo Abraham Rodríguez Cortés, quien permanece en prisión preventiva desde febrero del 2006, cuando fue detenido por la policía. Durante las dos jornadas de juicio llevadas a cabo en el Tribunal Oral de Los Ángeles, el sujeto aseguró ser inocente de las acusaciones imputadas por el Ministerio Público.
"Juro que soy inocente", declaró en varias oportunidades ante los magistrados Eduardo Abraham Rodríguez Cortés. Pese a sus dichos y a sus lágrimas, el sujeto no logró convencer al tribunal oral angelino, que lo juzgó durante dos días. En la tarde de ayer, este hombre fue declarado culpable de la violación de su pequeña hija ocurrida en una fecha no precisada -entre el 2004 y el 2005-, cuando la menor sólo tenía 11 años de edad.
La elocuencia y la facilidad de palabra demostrada por Rodríguez Cortés durante las dos jornadas, pesaron menos que la pruebas presentadas por el Ministerio Público, representado en esta causa por la fiscal María Gemita Rojas.
La profesional acusó al imputado, hasta antes de ser puesto en prisión preventiva conductor de buses interprovinciales, sobre la base de los peritajes efectuados por el Servicio Médico Legal, cuyos resultados constataron en la niña la existencia de "una desfloración compatible con un ataque de tipo sexual".
No sólo eso, pues la propia víctima entregó su versión de lo acaecido en el hogar que hasta el año pasado compartía en Laja con el condenado, su madre y dos hermanas.
Los jueces Pablo Freire, Christian Osses y Carlos De Borguie escucharon atentamente a la menor, quien en una sala contigua a la pieza donde se desarrolló el juicio efectuó un descarnado relato de los hechos, los cuales se habrían producido entre los años 2004 y 2005. De acuerdo con éstos, el imputado la agredió aprovechando los momentos en que ambos quedaban solos, consumando el ultraje en la habitación que la afectada compartía con sus dos hermanas.

El Catequista
La defensa del imputado argumentó que éste no es el responsable de los ultrajes (uno comprobado por la Fiscalía, varios según la niña), sino que el culpable sería otro pariente. Es más, Rodríguez Cortés fue presentado como un hombre casi ejemplar, preocupado de su familia y noble, al punto de dar su apellido a la hija que según la justicia posteriormente violó, de la cual no es el padre biológico.
Junto a su mujer, incluso, participaba como catequista en una Iglesia Católica de Laja.
Lo anterior, en la percepción del Ministerio Público, no quita que este hombre sea el autor de lo denunciado por la madre de la pequeña, cuando ésta se lo contó en enero del 2006.
En ese momento, la esposa del imputado no dudó, y dio a conocer los antecedentes a la justicia, que determinó la captura del ahora condenado. Tras ser formalizado, fue puesto en prisión preventiva en la cárcel de Yumbel, en febrero de año pasado.
La parte acusadora pidió un castigo de 15 años y un día para este individuo, por la violación y el abuso sexual que se le atribuían. No obstante, el tribunal lo absolvió por el segundo de los cargos, condenándolo sólo por el ultraje. Así, la pena que será informada el próximo sábado, a las 13 horas, debiera ser sustancialmente menor a lo trazado preliminarmente por el ente persecutor.
[10 de octubre de 2007]
la tribuna]

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